DEPORTES | Las habilidades no deportivas que nos da el deporte

En un mundo cada vez más invadido de avances tecnológicos, de robotización de tareas humanas y con un crecimiento exponencial de la inteligencia artificial, es imperativo para nosotros, los profesionales del ejercicio físico, transmitir a nuestros estudiantes un vasto bagaje de herramientas y habilidades que nos garantice su desarrollo integral.

Es un gran desafío para las clases de educación física a futuro lograr que nuestros alumnos desarrollen no solo habilidades motrices, sino también habilidades cognitivas y socioemocionales.

Entre estas últimas podemos mencionar algunas de gran importancia que desarrollamos a través de la actividad física y el deporte:

• Los alumnos aprenden la importancia del trabajo en equipo para la consecución de los objetivos.
• Esto a la vez también aumenta y mejora la calidad de las relaciones sociales con sus pares.
• El deporte también les enseña a desarrollar la perseverancia y la tolerancia a la frustración, ya que no siempre se puede ganar ni dominar una técnica nueva con expertis sin antes haber fallado varios intentos.
• La práctica deportiva regular estimula el desarrollo físico y mejora las capacidades motoras, lo cual promueve ineludiblemente una mejora en la salud física y mental.
• Otra de las habilidades no deportivas que nos brinda el deporte es la disciplina. El hecho de hacer algo de manera regular, sostenida en el tiempo ayuda a nuestros estudiantes a ser ordenados y metódicos. Estas virtudes pueden ser trasladadas también a otros ámbitos de sus vidas (ya sea personal, académico o familiar).
• Por último, podemos afirmar que la práctica deportiva ayuda a nuestros alumnos a mejorar la autoestima. Algo que es, sin sombra de dudas, una habilidad gravitante en su desarrollo personal.